Mochileo por la Ruta Panorámica de Puerto Rico – 22do día
Dormimos toda la noche como angelitos, súper cómodos y hasta tuvimos acondicionador de aire. Cuando sonó la alarma por la mañana tuve una seria discusión con la sabana y la almohada para poderme levantar. Este ha sido el segundo lugar con más comodidades en el que hemos pernoctado durante nuestro mochileo por la Ruta Panorámica de Puerto Rico.
Al llegar al área de la cocina nos percatamos que nos habían dejado pan criollo en la mesa. Preparamos el desayuno, dándole buen uso a todas las facilidades que teníamos disponibles en la inmensa cocina del parque de bombas.
Llegado el momento de salir quedaban menos bomberos de turno y uno de ellos daba mantenimiento a las áreas verdes. Nos despedimos de los bomberos agradeciendo su hospitalidad y con muy buen ánimo, partimos disfrutando de un buen día soleado y fresco.
Decidimos extender este tramo unos pocos kilómetros para hacer del último uno más corto. Así llegaríamos a Mayagüez menos cansados para el final de la jornada.
Al llegar al cruce de la carretera #106 con la #119 nos detuvimos en un negocio rodante donde vendían pinchos entre otras cosas. Ya nos habíamos comunicado con unas amistades que venían de camino para suplirnos de comestibles y nos habían indicado que traerían comida preparada para que comiéramos. Así que solo pedimos un pincho para compartirlo entre los dos en lo que llegaba la comida pues se había hecho un poco tarde y ya sentíamos hambre.
El dueño al parecer, pensó que estábamos necesitados y nos ofreció otro de gratis lo cual agradecimos por su amabilidad declinando su oferta explicándole las razones. Ciertamente contábamos con los medios para comprar otro pero solo queríamos comer algo liviano para sostenernos hasta que llegaran nuestros suministros.
Poco después y aproximadamente un kilómetro mas tarde, llegaron los suministros y la comida ofrecida por nuestras amistades. Prepararon; arroz guisado con pollo, habichuelas rojas y ensalada de coditos. La comida estaba exquisita y comimos tanto que luego nos fue pesado el resto del camino.
La tarde se estaba poniendo oscura y el pronostico para la tarde no era muy alentador. Tal parecía que terminaríamos nuevamente caminando bajo la lluvia en la tarde. Seguimos la ruta tratando de apresurar el paso pero nos sentíamos muy pesados luego de haber comido tanto. Siempre planifico comidas livianas durante los mochileos y las suplemento con barras nutritivas adicionales para comerlas mientras camino pero en esta ocasión no pude negarme a comer lo que nos trajeron y tuvimos que pagar las consecuencias. Afortunadamente alcanzamos llegar a la cancha bajo techo del barrio Cambalache en la carretera #339 de Mayagüez.
Rápidamente localizamos un buen lugar para acampar y montamos la caseta pues la lluvia amenazaba por caer en cualquier momento. Terminamos a tiempo, pues la lluvia se precipito a eso de las 5.00 PM y no se detuvo hasta entradas las 10.30 PM.
Esta seria nuestra última noche del mochileo por la Ruta Panorámica y la naturaleza quería que nos lleváramos el recuerdo de una de las lluvias mas intensas que recordaba en mis años de mochileo. A pesar de todo, pudimos acomodarnos a tiempo dentro de la caseta y acomodar todo para pasar la noche sin contratiempos y completamente secos. Si tuvimos unas pocas gotas de agua que se formaron dentro de la caseta por motivo de la condensación.
Al tenernos que refugiar dentro de la caseta desde temprano tuvimos que calentar la comida en uno de sus vestíbulos. El calor producido por la estufa sumado al calor de nuestros cuerpos y la humedad de nuestro aliento se combinó con la humedad relativa. La diferencia marcada en temperaturas entre el interior y el exterior de la misma hizo que se condensara agua en la parte interior del “rain fly”. Casi la totalidad de la misma siguió su curso normal hacia el suelo pero siempre cayeron algunas gotas hacia el interior de la tienda, pero nada que el saco de dormir no pudiera manejar efectivamente.
Como ya había explicado en artículos anteriores, no importa cuan buena sea la caseta de acampar que adquieras, la condensación siempre será un elemento presente y es importante que conozcas su mecánica para que puedas lidiar con la situación cuando se presente. Lo que realmente me sorprendió fue la manera tan efectiva en que ésta caseta de acampar a manejado todas las condiciones climatológicas confrontadas hasta ahora y por un precio tan económico.
Luego de contactar a los familiares para informarles de nuestro bienestar, nos quedamos charlando hasta tarde. Esto debido al ruido de la lluvia y tal vez por la todos los pensamientos que corrían por mi mente recordando todas las anécdotas del viaje y la nostalgia que sentía por estar tan cerca del final de la travesía.
Notificación. El mochileo por la Ruta Panorámica de Puerto Rico fue realizado entre el 9 de Febrero y el 2 de Marzo de 2020. Hago esta aclaración en respuesta a todos aquellos que me han escrito preguntándome si hemos estado caminando en medio de la pandemia.
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