Mochileo por la Ruta Panorámica de Puerto Rico 13

Mochileo por la Ruta Panorámica de Puerto Rico – 15to día

Otro día hermoso, amaneció a 59 grados Fahrenheit y completamente despejado. Confieso que se me hace difícil levantarme en temperaturas tan ricas, especialmente cuando uno está calientito dentro del saco de dormir. Sin embargo, debíamos continuar, hoy haríamos un esfuerzo por llegar al pueblo de Adjuntas donde tenemos planeado tomarnos un día completo de descanso.

Empacamos todo dentro de la caseta y salimos de ella con la única tarea de desmontar la misma. Decidimos comer algunas barras de chocolate con almendras que teníamos a mano y llegar a “El Abanico” para desayunar. El lugar estaba a unas dos millas, nos era conocido y si estuviese cerrado al llegar pues prepararíamos el desayuno en el área. Comimos chocolate hasta llegar.

Luego de “calentar motores” llegamos al lugar y estaba abierto. Desayunamos muy bien y la dueña, muy amablemente, permitió que cargáramos un poco los celulares y baterías que se agotaban rápidamente. Ya habíamos utilizado la carga de los equipos por dos días completos y estaban apunto de agotarse. Para aquellos que no lo sepan, es recomendable poner los celulares en el modo de “avión” cuando estás en áreas donde no hay señal para que ahorres baterías.

Continuamos el camino disfrutando de un día variable, fresco en la mañana y un poco caluroso en ocasiones pero en general se mantuvo parcialmente nublado todo el día. Nos detuvimos a descansar en otro negocio llamado “4 de Julio” allí consumimos unos refrigerios y nos permitieron cargar baterías y el celular por un rato. El lugar cuenta con amplio estacionamiento, área para comer y baños muy limpios.

Al salir del lugar encontramos 2 preciosas guayabas maduras que nos cayeron del cielo, eran las únicas dos que quedaban en el árbol. Dios continuaba supliendo por el camino. Poco más adelante, nos encontramos con Eddie, un buen amigo, que nos trajo las provisiones para los próximos días.

Como los hay buenos también los hay malos. Nos detuvimos en otro negocio al lado del camino para probar unas frituras, pero esta vez ambos quedamos decepcionados pues no estuvieron buenas. Sin embargo luego mas tarde llegamos a un pequeño negocio al lado del camino llamado “Lydia’s” el cual conocíamos de antemano. El mismo había sufrido graves daños tras el huracán María.

Nos encontramos con la dueña quien nos invitó a comer, ya habíamos comido y no teníamos apetito pero fue mucha su insistencia y terminamos aceptando un sorullo de maíz, un relleno de papa, agua y un Coco Rico. Cuando salíamos traté de pagar lo consumido pues sabía que en ésta área no hay mucho tráfico y la economía en estas zonas rurales no es la mejor, pero ella no lo permitió. Ésta fue otra muestra de la calidad humana de un pueblo noble. Agradecimos a doña Lydia y partimos.

Aun de camino al pueblo de Adjuntas, unos pocos kilómetros antes de llegar a la carretera #10, se rajó a llover. El pronóstico advertía que estaríamos sufriendo los efectos de un sistema meteorológico fuerte por los próximos días y eso fue uno de los factores que termino convenciéndonos a tomar un día de descanso en Adjuntas. Luis sabía de un hotel en el pueblo y trataríamos de quedarnos en él cuando llegáramos. Nos detuvimos en el balcón de una casa para ponernos los ponchos y llamamos al Hotel Monte Río para hacer la reservación.

Al llegar a la carretera #10 preguntamos a un vendedor junto al cruce si había acceso peatonal por la ruta normal hacia el pueblo, pues había un letrero que indicaba que no había acceso vehicular. El joven no nos supo decir, estaba lloviendo a cántaros y tomamos el riesgo de continuar la Ruta Panorámica normal. Luego de caminar un tramo bastante largo llegamos al área de construcción y para nuestra sorpresa no había ninguna forma segura de pasar caminando por el lugar. La excavación era inmensa, profunda y no había acceso seguro por el cual pasar. Frustrados, empapados de la cintura para abajo y agotados, tuvimos que regresar, ésta vez subiendo todo el tiempo para llegar nuevamente a la carretera #10 y buscar el desvío que nos llevaría de vuelta a la Ruta Panorámica. Ésta parte fue realmente una tortura.

Estábamos sumamente molestos pues la pobre rotulación no informaba adecuadamente sobre las condiciones de la carretera. Cuando encontramos el desvío, la carretera era tan empinada que literalmente tuve que bajarla de espaldas, poco a poco y con la ayuda de los bastones para evitar resbalar y destruir mis rodillas. Luis, con dificultad, aprendió a bajar en reversa, poco a poco hasta llegar nuevamente al camino. Todo esto, bajo una implacable lluvia y cuidándonos de los vehículos que subían y bajaban el desvío con mucha precaución pues a penas había paso para un vehículo a la vez. Creo que esta fue una de las partes más difíciles encontradas hasta ahora.

Finalmente concluimos nuestra caminata del día al llegar a donde queríamos comer. Conocíamos y habíamos comido muchas veces en el Restaurante “Guigui” y no dejaríamos pasar la oportunidad. Allí no tan solo comimos sino que pudimos cargar tanto las baterías físicas como las del equipo electrónico. Desde allí nos comunicamos con el hotel y luego de terminar la cena, fueron tan amables en irnos a recoger.

Nos vino como anillo al dedo pues increíblemente continuaba la lluvia y ya había oscurecido. La dueña del lugar nos atendió de maravilla. Sus atenciones sobrepasaron por mucho lo que se podía esperar normalmente. Digo esto pues le habíamos preguntado si el lugar tenía maquinas de lavar y secar ropa. Nos dijo que no porque las que tenía eran para uso del hotel y ya ella estaba a punto de terminar el día de trabajo para irse a su casa. Sin embargo y a pesar de que ya se habían ido la mayoría de sus empleados, accedió lavar y secar nuestras ropas esa misma noche y sin cargo alguno! Realmente otra hermosa bendición.

Allí nos instalamos y luego de un rico baño con agua caliente nos comunicamos con familiares y amigos para luego descansar. Ya mañana tomaremos el día libre y dedicaremos el día a explorar el pueblo de Adjuntas.

Notificación. El mochileo por la Ruta Panorámica fue realizado entre el 9 de Febrero y el 2 de Marzo de 2020. Hago esta aclaración en respuesta a todos aquellos que me han escrito preguntándome si hemos estado caminando en medio de la pandemia.

Puedes ver el vídeo completo aquí, https://youtu.be/_p4lzMFScEY

Leave a Reply

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.